PRIMERA SESIÓN: Cualidad de idéntico
Nos ponemos en marcha, a desgranar eso que somos para hacer frente a eso que nos echan en cara, para encontrar eso que pensamos que somos frente a lo que somos en cada marco, en cada contexto, para descubrir también eso que piensan que somos aquí mismo, en cada calle y en cada esquina, antes de presentarnos y estrechar manos y lazos.
Como si fuera una ecuación algebraica trazamos sistemáticamente las líneas entre nuestras incógnitas y lo que pensamos saber para encontrarnos con un perogrullo tras otro. Aunque claro, si nos hemos juntado para esto, es porque pensábamos cosas parecidas sobre el tema, así que las incógnitas se quedan ahí. Inescrutables.
¿Cuánto de nuestra identidad se construye con la mirada del otro?
Dice la RAE que la Identidad es "cualidad de lo idéntico" (primera definición).
¿Y por qué parece ser cualidad de lo diferente? ¿Se equivoca la RAE? No sería la primera vez. Pero qué bonito sería que la mirada hacia el otro no fuera en negativo buscando la diferencia, que fuera en positivo, para encontrar aquello que compartimos con quien tenemos enfrente. ¿No son los ojos el espejo del alma? Pues dejemos que se nos asomen otros a ellos para verse reflejados.
Esta primera sesión ha sido mucho hablar y poco discernir; veo como todas y todos estamos metidas en el mismo fango. Venimos de lugares muy distintos y nos hemos encontrado para tratar de este tema, para descubrir que estamos en las mismas. -Mi identidad la define mi ocupación-, razona Yavanna en voz alta, -¿Y si te quedas en paro? ¿cuánto tiempo sin estar ocupado en aquello a lo que te "dedicas" tiene que pasar para que deje ser tu identidad?- contesta otra compañera. -Mi identidad es cambiante, si fuera siempre igual dejaría de ser.- dice alguien.
Según la RAE, la Identidad es un "Conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los caracterizan frente a los demás" (segunda definición). Entonces si es compartida no debería ser objeto de tanta discusión, pienso yo, ¿qué hacemos dándole tanta vuelta? Mi identidad es la tuya en algunas cosas, en otras no, y no pasa nada, y su posible unicidad viene de la suerte de combinaciones que uno acumule.
Termina el debate y me voy pensando en que yo lo que quiero es acumular, probar combinaciones, transformar e incluso inventar. -Cuando llegué a España de Erasmus pensé que por primera vez podía inventarme que era otra persona y que nadie sabría la verdad.- nos cuenta nuestra compañera Zuzana. Durante la sesión hemos jugado a inventar identidades falsas, propias y ajenas, a favor y en contra de los estereotipos, y no es tan difícil hacerlo creíble, quitarse las cargas de tanto juicio que nos han puesto encima, de tanto juicio y prejuicio. Dice la RAE, Identidad es la "conciencia que tiene una persona de ser ella misma y distinta a las demás" (tercera definición), y yo digo que lo que quiero es acumular para ser yo misma, probar combinaciones y transformaciones para ser yo misma y distinta a los demás, sin miedo ni rechazos, sin que me tachen de ser otra cosa porque para que otros se inventen quién soy, de dónde provengo o a qué pertenezco prefiero inventármelo yo.
Como si fuera una ecuación algebraica trazamos sistemáticamente las líneas entre nuestras incógnitas y lo que pensamos saber para encontrarnos con un perogrullo tras otro. Aunque claro, si nos hemos juntado para esto, es porque pensábamos cosas parecidas sobre el tema, así que las incógnitas se quedan ahí. Inescrutables.
¿Cuánto de nuestra identidad se construye con la mirada del otro?
Dice la RAE que la Identidad es "cualidad de lo idéntico" (primera definición).
¿Y por qué parece ser cualidad de lo diferente? ¿Se equivoca la RAE? No sería la primera vez. Pero qué bonito sería que la mirada hacia el otro no fuera en negativo buscando la diferencia, que fuera en positivo, para encontrar aquello que compartimos con quien tenemos enfrente. ¿No son los ojos el espejo del alma? Pues dejemos que se nos asomen otros a ellos para verse reflejados.
Esta primera sesión ha sido mucho hablar y poco discernir; veo como todas y todos estamos metidas en el mismo fango. Venimos de lugares muy distintos y nos hemos encontrado para tratar de este tema, para descubrir que estamos en las mismas. -Mi identidad la define mi ocupación-, razona Yavanna en voz alta, -¿Y si te quedas en paro? ¿cuánto tiempo sin estar ocupado en aquello a lo que te "dedicas" tiene que pasar para que deje ser tu identidad?- contesta otra compañera. -Mi identidad es cambiante, si fuera siempre igual dejaría de ser.- dice alguien.
Según la RAE, la Identidad es un "Conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los caracterizan frente a los demás" (segunda definición). Entonces si es compartida no debería ser objeto de tanta discusión, pienso yo, ¿qué hacemos dándole tanta vuelta? Mi identidad es la tuya en algunas cosas, en otras no, y no pasa nada, y su posible unicidad viene de la suerte de combinaciones que uno acumule.
Termina el debate y me voy pensando en que yo lo que quiero es acumular, probar combinaciones, transformar e incluso inventar. -Cuando llegué a España de Erasmus pensé que por primera vez podía inventarme que era otra persona y que nadie sabría la verdad.- nos cuenta nuestra compañera Zuzana. Durante la sesión hemos jugado a inventar identidades falsas, propias y ajenas, a favor y en contra de los estereotipos, y no es tan difícil hacerlo creíble, quitarse las cargas de tanto juicio que nos han puesto encima, de tanto juicio y prejuicio. Dice la RAE, Identidad es la "conciencia que tiene una persona de ser ella misma y distinta a las demás" (tercera definición), y yo digo que lo que quiero es acumular para ser yo misma, probar combinaciones y transformaciones para ser yo misma y distinta a los demás, sin miedo ni rechazos, sin que me tachen de ser otra cosa porque para que otros se inventen quién soy, de dónde provengo o a qué pertenezco prefiero inventármelo yo.
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